Salvar a La Cámpora: una muestra de cómo opera mediaticamente el kirchnerismo

Un primer análisis de cómo los diarios cubrieron la represión del día de ayer en Santa Cruz, lo tomamos del portal Diariosobre Diarios:

Clarín, La Nación y El Cronista coinciden en presentar como noticia central el conflicto en Santa Cruz y en utilizar, en su respectivo título, el concepto “ajuste” para describir dos iniciativas económicas del gobernador Peralta. En cambio, Página/12 y Ámbito relegan a espacios secundarios los incidentes y no emplean el término “ajuste”.

Si bien esta observación muestra claramente que el ultra-oficialista Página/12 y el semi-oficialista Ámbito Financiero operaron del mismo modo, lamentablemente, queda fuera del análisis el periódico kirchnerista Tiempo Argentino el cual, sin duda, fue el diario que más se destacó en la operación para desligar al gobierno nacional del ajuste en Santa Cruz. Además este diario, cínicamente, intenta mostrar a los arribistas de La Cámpora como los defensores de los intereses populares. Pura hipocresía, veamos.

Parte de los hechos son claros: El gobierno de Santa Cruz intentó llevar adelante el ajuste, ante esto hubo resistencia por parte de los trabajadores que impidieron a la legislatura sesionar y, como respuesta a la manifestación, represión policial. Todo esto desembocó en una crisis política que incluyó la renuncia de 8 funcionarios, entre ellos algunos miembros de La Cámpora.

Ahora ¿por qué renunciaron los militantes de la agrupación de Máximo Kirchner?

Para responder esta pregunta Página/12 lo cita al legislador Matías Bezi, uno de los referentes de ese espacio, que argumentó estar en desacuerdo “con las condiciones en las cuales se prevé que seguirá la situación”, en que “existe un esquema de un espacio político” en el que no se sienten incluidos y, principalmente, en que el gobierno de Peralta “claramente no está alineado con la Casa Rosada”.

Tiempo Argentino por su parte, no anda con vueltas. El título principal de su portada dice: Santa Cruz: Peralta quizo imponer una ley de los ’90. Gremios públicos y legisladores de La Cámpora frenaron la sanción de un duro ajuste impulsado por el gobernador que incluía elevar la edad jubilatoria y suspender las paritarias. La sesión de la legislatura debió ser levantada. Renunció el jefe policial. Funcionarios ligados a la juventud kirchnerista se alejaron del gobierno provincial.

¿Es esto así? ¿fueron los jóvenes K los garantes de que el ajuste no saliera?

Cualquiera que lea Clarín comenzaría a dudarlo, pues este diario recoje la siguiente declaración: “Me llama la atención el cambio de discurso de estos chicos que delante de los catorce intendentes se habían comprometido a acompañar estas leyes”, replicó ayer el jefe de bloque del FPV, Rubén Contreras. “Los que querían que se sancionen si o si y se vote el texto sin cambios eran los muchachos de La Cámpora”, explicó Contreras.

Y las dudas se incrementan si leemos LaNación, pues este periódico lejos de ubicar la responsabilidad de la “ley de los ‘90” exclusivamente en el gobernador provincial, sostiene: El miércoles a la noche, en una reunión con 14 intendentes, los 22 diputados kirchneristas y los ministros, el gobernador aseguró que la Presidenta estaba al tanto de las reforma de la ley previsional y que funcionarios de Economía y de la Anses se encontraban auditando las cuentas de la provincia. En esa reunión todos los legisladores, incluidos los representantes de La Cámpora, acordaron aprobar la emergencia económica.

Entonces ¿los muchachos de La Cámpora apoyaban o no apoyaban el ajuste? ¿la ley noventista era impulsada por Peralta de manera autónoma o el gobierno nacional estaba tras la misma?

Para dilucidar estas cuestiones, quizás convenga investigar un poco que dicen los periódico santacruceños. Sin duda no es recomendable comenzar con El Periódico Austral, el diario del ex chofer de Nestor Kirchner y actual multimillonario de los medios, Rudy Ulloa, pues éste no sólo es íntimo amigo de Máximo Kirchner, sino que además se sospecha que sería el dueño de Página/12, con lo cual podemos imaginar un tratamiento similar (A propósito ¿no es una vergüenza que Página/12, una de las trincheras desde la cual el kirchnerismo batalla por la “democrática” ley de medios, mantenga en el anonimato a sus propietarios?).

De todos modos, veamos que dice.

No, evidentemente teníamos razón, no era lo mas recomendable. Si la portada ya muestra un enfoque derechista y represor, el único artículo sobre el tema nada dice de los muchachines y su inesperada renuncia.

Vayamos entonces a un portal que nos genera mayor confianza, aquel que supimos consultar cuando seguíamos la huelga de los docentes de Santa Cruz que en Buenos Aires los medios ocultaban y distorsionaban (ver acá, acá y acá), OPI Santa Cruz.

Son varias las notas publicadas en OPI al respecto y aportan datos interesantes. En una de ella, titulada ElKirchnerismo va por un nuevo Gobernador. Utiliza como mano de obra a La Cámpora, se sostiene que los proyectos de Emergencia y de reforma previsional fueron ordenados por Cristina y elaborados por el equipo de La Cámpora y bajado a la Cámara por Peralta. Ahora dicen desconocerlo porque pretenden no pagar el costo político y debilitar al gobierno.

Otra nota, escrita en medio de los incidentes y antes de la renuncia de los diputados camporistas Matías Bezzi y Mauricio Gómez Bull, nos cuenta un dato de color, pero que vale la pena ser compartido con nuestros lectores: los legisladores de La Cámpora ingresaron al recinto disfrazados de … policías (y algunos dicen que les quedaban pintados)

Finalmente, otro artículo del mismo portal de noticias nos brinda este clarificador fragmento:

Ha sido reconocido por otros diputados del oficialismo: La Cámpora fue la impulsora principal del paquete de medidas enviado a la Legislatura por el Gobernador Peralta y tanto Bezzi como Gómez, además de adherir a su firma fueron los primeros en ingresar a la Legislatura para despachar su aprobación, tratando de convencer a los demás diputados, que la Emergencia económica y la Reforma Previsional eran necesarias “para la continuidad del modelo”, hecho que no era aprobado por muchos legisladores quienes pretendían dar una discusión más seria.

Posteriormente, cuando la situación social se desmadró y la actitud de los gremios forzaba un aplazamiento de las normas; cuando en las calles comenzaron a aparecer los heridos y la gente sitió a la Cámara de Diputados, responsabilizándolos de este ataque a la clase trabajadora, Bezzi y Gómez Bull (por orden de Ulloa) cambiaron 180 grados su posición política ante el proyecto y salieron a decir que en ningún momento estuvieron de acuerdo con su implementación y que “no lo firmarían, porque atentaban contra los derechos adquiridos de los trabajadores”. Desde entonces, además de “traidores” sus pares los denominan “mentirosos”.

Conclusión

Para nosotros queda claro. Fue la movilización de los trabajadores y su lucha en las calles no dejándose intimidar y resistiendo los embates de la policía la que pudo doblegar las intenciones del gobierno. Si los legisladores de La Cámpora realmente hubieran estado en contra de la ley de emergencia económica lo hubieran expresado públicamente y desde un primer momento. De hecho, si esta hubiera sido su actitud tranquilamente podrían haberse sumado a la movilización de los trabajadores ofreciendo su banca al servicio de la lucha de clases, como hacen los diputados obreros del FIT en Neuquen, lo cual hubiera sido un claro gesto político. Como ya dijimos, muy por el contrario, los jóvenes K se tuvieron que poner la gorra para pasar desapercibidos frente a los trabajadores movilizados.

Podríamos terminar diciendo que Tiempo Argentino o Roberto Caballero, su director, muestran no hacer periodismo sino literatura fantástica, pero no somos indulgentes con nuestros enemigos de clase. Ellos no son artistas, como ya lo dijimos acá, son canallas.